Los portátiles nos permiten trabajar de forma más flexible,
eficiente y ser más móviles, pero también son los causantes de numerosos problemas
de cuello, hombro y espalda relacionados con el trabajo.
El portátil fue diseñado para los hombres y mujeres de
negocio que tenían que trabajar en aviones o trenes, pero no para un uso intensivo.
Sin embargo, el uso del portátil ha alcanzado gran
popularidad, gracias a los bajos precios, al aumento del trabajo a domicilio y
al acceso inalámbrico a Internet. Hoy en día ordenadores portátiles y tablets
están en todas partes, hasta el punto que en 2005, las ventas de portátiles
superaron a los ordenadores de sobremesa.
Incurrir en una mala
postura utilizando un portátil es
inevitable debido al propio diseño de los portátiles, con la pantalla pegada al teclado.
La distancia aconsejable hasta el monitor es de
aproximadamente nuestro brazo extendido, pero se necesita el teclado más cerca
de nosotros, de forma que si alejamos el portátil hasta los 50/60cm obligamos a
estirar los brazos y curvar los hombros hacia delante. Por el contrario si
acercamos el portátil hacia nosotros debemos inclinar la cabeza hacia abajo,
con lo que el peso del cráneo al desplazarse de la vertical de la columna
aumenta la presión sobre las cervicales y la columna, además es una presión
estática ya que no estamos en movimiento, lo que provoca problemas en el cuello, espalda
incluso hormigueo en los brazos.
Si yo hubiese diseñado el portátil lo habría hecho con la
pantalla desmontable, esta opción ya está disponible en el mercado, pero los
precios todavía son elevados. Por eso es recomendable no usar el portátil como
equipo de escritorio, y en el caso de no tener más remedio tener en cuenta los
siguientes consejos:
- Utilice un teclado y un ratón separado de la pantalla para que el portátil se pueda poner en un soporte con la pantalla a nivel del ojo.
- Utilice su portátil en una base estable donde haya soporte para los brazos, y no en su regazo.
- Haga descansos regularmente. Si usted se mueve, hay mucha menos tensión en sus músculos y articulaciones.
- Adopte una buena postura sentado con apoyo lumbar, y asegurándose que los demás equipos de escritorio estén a su alcance.
- Adquiera buenos hábitos antes de que comience el dolor. Los problemas cervicales, problemas en hombros y espalda aparecen poco a poco con el paso del tiempo.
Si quiere mejorar su postura delante del portátil y evitar
dolores futuros, no dude en ponerse en contacto con nuestros expertos en
ergonomía en el 93 775 01 46 o por email f-vidal@fvidal.es